domingo, 3 de abril de 2016

LOS SUPUESTOS MILAGROS DE LA MADRE MARAVILLAS

MILAGRO n. m. (lat. miraculum, der. de mirari, asombrarse,admirar). 1. En lenguaje religioso, hecho que no se explica por causas naturales y que se atribuye a una intervención divina. - 2. Cualquier suceso o cosa extraordinaria y maravillosa.

Los teólogos católicos definen el milagro como "un hecho producido por una intervención especial de Dios, que escapa al orden de las causas naturales por Él establecidas, y destinado a un fin espiritual".

El concilio Vaticano I condenó la opinión de quien sostuviese "que es absolutamente imposible reconocer con certeza los milagros y probar convincentemente con su ayuda el origen divino de la religión de Cristo".

Los teólogos no ignoran que el científico es determinista por sistema. En presencia de un hecho milagroso sólo le piden que no niegue a priori su posibilidad, ya que nadie puede haber establecido una enumeración completa de las posibilidades naturales. El filósofo puede ir un poco más lejos, pero queda forzosamente un margen de incertidumbre. Sin ésta, la fe, que entraña un elemento de libre autodeterminación, sería obligada. Admitir el milagro como una prueba de la divinidad del mensaje evangélico, es trascender la duda del científico y la conclusión ambigua del filósofo, es hacer un acto religioso Por esta razón los antiguos escritores cristianos insisten en que ha de haber un presupuesto de pureza moral para distinguir los verdaderos milagros de los falsos.

(Gran Enciclopedia Larousse, 1996, tomo 15)

ESTO ES DESPUÉS DE MEDIANOCHE.

El 18 de julio de 1998, en Concordia, Argentina, Manuel Vilar, un niño de apenas un año y medio, el más pequeño de 3 hijos, cae a una piscina y se ahoga. Éste se encontraba de visita con su familia (procedente de Nogoyá, localidad del norte de Argentina) pasando el día en la quinta del hermano de su madre, Alicia Vilar. El hecho ocurrió mientras se preparaba la comida y nadie en el lugar se percató del percance hasta pasados unos minutos, que después se estimaron en casi 20 por parte de los médicos. En medio de los preparativos del almuerzo, la madre notó que el perro ladraba fuera de si. Su cuñada fue a echar un vistazo y volvió temblando incapaz de articular palabra. Entonces la madre de Manuel corrió a la piscina y allí estaba el niño, flotando boca abajo. Cuenta su madre: "Lo alzamos con dificultad, estaba inflado y pesadísimo por el agua que había tragado. El marrón de sus ojos era como un cristal opaco. Mi marido intentó hacerle respiración boca a boca; lo siguiente fue subir al auto y partir al hospital. Era como una película que se detiene en una escena y pasa a la siguiente con cortes entre medio".

Marcharon con urgencia al hospital San Blas, trayecto que duró 10 minutos más. Uno de los médicos que lo atendió allí Edgardo Labarba cuenta lo que ocurrió seguidamente:"Una persona muere de asfixia por inmersión a los 5 minutos. Según el cálculo que hicimos más tarde, Manuel estuvo sumergido casi 20 minutos y la familia tardó otros 10 en traerlo. Lo recibimos sin pulso y con midriasis bilateral (pupilas dilatas al máximo). El electrocardiógrafo no mostraba relieve. Hacía rato que esa criatura había atravesado el umbral y correspondía dar aviso a la familia." El niño estaba clínicamente muerto.

Continúa relatando el doctor Labarba: "Pero al asomarnos a la sala de espera, en vez de la conocida escena de quebranto, la doctora Alejandra Pedrazoli y yo vimos a una madre que rezaba en voz queda, sosteniendo una estampa que resultó ser de Sor Maravillas. Otras personas oraban a su alrededor; sentí que se me erizaba la piel".

La madre de Manuel, Alicia, rezaba y le pedía a la Madre Maravillas de Jesús (una religiosa española ya fallecida hacía años), que salvara a su hijo. Aconsejada por una vecina, Alicia empezó a rezar, y le rezó con desesperación a esa monja que veneraban las carmelitas del Carmelo de la Preciosísima Sangre, un convento de clausura ubicado a un costado de Nogoyá (donde residía la familia). Fueron en concreto las carmelitas de Nogoyá quienes le dieron a la madre del chico unas estampas de la Madre Maravillas, a quien Alicia encomendó la salvación de su hijo. En palabras de Alicia: "Me impresionó la intensidad de su mirada(de la monja), también su rostro serio, parecido al de las mujeres de esta tierra. Sobre todo al de aquellas que trabajan de sol a sol en el campo. Un mes antes del accidente, ella fue beatificada y yo presentí que ese acto tendría un significado en mi vida. No fue casualidad que llevara en el bolso una estampa de la madrecita. En el hospital veía la silueta de los médicos a través del cristal y decía: "Sor Maravillas de Jesús, devuélveme a mi hijo".

Tras media hora de reanimación cardiovascular el niño recuperó la respiración espontánea. Con todo, los médicos estimaban que, de seguir el niño con vida, quedaría en estado vegetativo, con grandes daños cerebrales de por vida, a causa del tiempo que transcurrió sin que su cerebro recibiera oxígeno.
Aquella noche, en la habitación hospital con el niño intubado, su madre que lo acompañaba oyó ruidos y fue testigo de que Manuel, se había incorporado, la mascarilla de oxígeno había caído al suelo, y trataba de quitaba de quitarse el catéter. El niño, según su madre, preguntaba si ya estaba lista la comida y no era consciente de todo lo que había ocurrido. A partir de entonces Manuel vivió una vida tranquila, como cualquier otro niño, sin ninguna consecuencia neurológica por el gravísimo accidente. Para Alicia, la Madre Maravillas de Jesús había escuchado sus ruegos, y el milagro por el que tanto había rezado se había cumplido, había salvado a su hijo.

En 2008, Manuel ya tenía 12 años, y era un niño aparentemente normal. Cada cierto tiempo el doctor Labarba asistía a las competiciones de natación en las que participaba Manuel. Le parece extraordinario que Manuel no le tema al agua, y en general, que no le haya quedado ningún trauma del episodio.

El doctor Labarba, a quien Manuel consideraba un amigo entonces, expresaba lo siguiente en cuanto a su veredicto sobre el caso: "La ciencia no admite la mediación de santos en un proceso de recuperación. Pero la ciencia tampoco acepta dogmas de ninguna clase. Digamos que esa madre contagió con su fe al equipo que atendía a un niño que se daba por muerto".


El 5 de julio de 1976, en España, Alfonsa García Blázquez, de 22 años, empezó a tener una fiebre muy alta y esta no descendía tras haberla tratado con antibióticos. Ingresó en el hospital de la Santísima Trinidad de Salamanca diez días después.

El doctor Sánchez Rodríguez le diagnosticó "agranulocitosis con shock séptico y afección hepático renal". Los enfermos con estas características no suelen salvarse. Sor Mónica, una religiosa que se encontraba en el hospital sugirió rezar a la Madre Maravillas y la joven comenzó a ello.

Alfonsa García estaba cada vez peor, las oraciones eran constantes. Se le diagnosticó poco tiempo después insuficiencia renal, de pulmón, del aparato digestivo y alteraciones en la coagulación además de otros muchos más síntomas. El 4 de septiembre la llevaron a quirófano urgentemente y tres días después, se produjo una crisis que la llevó a un estado "semicomatoso". Aconteciendo todo esto, continuaban los rezos a la Madre Maravillas, y casi sin aliento, Alfonsa comenzó a preguntar:"Madre Maravillas, no me vas a curar?".

Los médicos la desahuciaron, no creían que pudiese sobrevivir una noche más. Uno de ellos, que se iba para casa, se despidió asegurando que no volvería a verla viva. Y con más insistencia la familia pedía la familia su salvación a la religiosa. Una carmelita dejó una estampa de Sor Maravillas junto a la cama.

En palabras de la misma Alfonsa García: "Llevaba muchísimo con 40 y 41 de fiebre. Ya me habían practicado ventitantas transfusiones. Aquello se acababa. Me decía (a sí misma): "Me muero, de ésta no salgo".

El 11 de septiembre Alfonsa se curó por completo. Sobre las 9:30 de la mañana, la joven se despertó sintiéndose bien y todos los síntomas habían desaparecido. Se le realizaron análisis de sangre y su diagnóstico no daba lugar a dudas, Alfonsa estaba curada. "Sólo puedo decir que ya tiraba la toalla, y luego las cosas empezaron a ir muy bien", cuenta la propia Alfonsa, "Hubo algo, pero, ¿quién soy yo para decirlo?".

Aquella recuperación que parecía milagrosa, asombró a todo el mundo, incluso a los médicos. Uno de ellos, que la atendió, comentó:"Aunque yo no soy muy propenso a creer en estas cosas, para mí esto es un milagro".

Cuenta Alfonsa que aquella experiencia la cambió y que siempre le ha estado agradecida a Sor Maravillas :"No sólo me acuerdo de cada 11 de diciembre, festividad de Santa Maravillas (y día de su fallecimiento en 1974). Es un continuo dar gracias. Siempre me pregunto por qué me ocurrió a mí. Yo era muy joven, 22 años, y sobreviví, mientras que hay padres que fallecen y dejan atrás a sus hijos pequeños. Cada 11 de diciembre celebro que estoy viva, aunque no sé por qué. Supongo que es una oportunidad para ser mejor persona".

El 10 de mayo de 1998, el Papa, Juan Pablo II beatificó en Roma a la Madre Maravillas de Jesús a partir de la consideración milagrosa que tuvo la recuperación de Alfonsa García Blázquez en 1976.

Una comisión científica declaró en el año 2001 como inexplicable la curación de Manuel Vilar en 1998. La Iglesia mando realizar una investigación y los testimonios recogidos durante esta fueron enviados a España y después a Roma, donde los analizaron sucesivas comisiones científicas y teológicas. Finalmente uan comisión de 5 médicos evaluó las pruebas, y el veredicto quedó firmado el el 10 de mayo de 2001: "No se encuentra explicación científica para la salvación del pequeño Manuel. Lo sucedido quiebra las leyes de la naturaleza. La Madre Maravillas de Jesús tuvo en brazos al niño Manuel Vilar, lo que corrobora que realmente fué un milagro", señaló el texto elaborado por la Comisión Vaticana para la Causa de los Santos.

Manuel Vilar y su madre, Alicia, junto a una hermana de la Madre Maravillas de Jesús, en su viaje a España en 2003 durante la Canonización de la religiosa.

Juan Pablo II, canonizó (reconociendo su estado de santidad) a la Madre Maravillas en el año 2003 en su último viaje a España, en la Plaza de Colón de Madrid. "Puso a Dios en el centro de su vida y por encima de cualquier otra cosa", sentenció el Papa. Manuel Vilar, junto con su madre Alicia, acudió a España para asistir a la canonización de la religiosa.

¿CÓMO FUE LA VIDA DE LA MADRE MARAVILLAS DE JESÚS?.

La Madre Maravillas nació en el seno de una distinguida familia en Madrid (España), el 4 de noviembre de 1891, siendo la menor de 4 hermanos. Sus padres fueron Luis Pidal y su madre doña Cristina Chico de Guzmán, Marqueses de Pidal. Fue bautizada ocho días después en la parroquia de San Sebastián con el nombre de María Maravillas Pidal y Chico de Guzmán.

Su familia ocupó destacados papeles en la vida política nacional. Su abuelo Pedro José Pidal, su padre Luis Pidal y su tío, Alejandro Pidal, desempeñaron importantes cargos políticos y los tres asimismo fueron, embajadores ante la Santa Sede. Su padre fué primero Ministro de Fomento.

Pasó su niñez y su juventud en casa. Fue educada en sus primeros años especialmente por su abuela materna, Patricia Muñoz. Nunca fue al colegio y recibió una educación privada. Mientras estudiaba en casa, durante su adolescencia y juventud se dedicó a obras de caridad, ayudando a muchas familias necesitadas en sus contínuas salidas a los barrios pobres de Madrid. Parece que tuvo una juventud de caridad, piedad y dedicación a su padre, al que cuidó hasta su muerte.

Leía frecuentemente las obras de Santa Teresa de Jesús y de San Juan de la Cruz y, cautivada por sus vidas y experiencias espirituales, decidió entrar en las Carmelitas Descalzas de El Escorial (Madrid) donde ingresó el 12 de octubre de 1919 recibiendo el nombre de "Maravillas de Jesús". Tenía mucha devoción al Sagrado Corazón de Jesús. Tomó el hábito en 1920 e hizo su primera profesión en 1921. Allí hizo expresión de una enorme capacidad de trabajo disciplina, tenacidad y una enorme fuerza interior. Allí mismo, detrás de la celosía que da al sagrario de la  Iglesia Conventual, recibió en 1923 la inspiración de fundar un Carmelo en el centro Geográfico de España, El Cerro de los Ángeles, donde se había erigido el monumento al Sagrado Corazón de Jesús en 1919 y se había consagrado a Él la Nación.

El Obispo de Madrid- Alcalá, Mons. Eijo y Garay acogió la idea y en 1924 la Hermana Maravillas y otras tres monjas carmelitas de El Escorial se instalaron provisionalmente en una csa de Getafe para atender desde allí la edificación del Convento. En esa casa hizo su profesión solemne el 30 de mayo de ese mismo año. En 1926 fué nombrada, por el obispo Eijo, priora de la Comunidad y el 31 de Octubre se inauguraba el nuevo Carmelo de El Cerro de los Ángeles.

Acudiendo entonces muchas vocaciones, la Madre Maravillas vio en ello una señal de Dios para fundar nuevas "casas de la Virgen". En 1933, a petición del obispo, misionero carmelita, Mons. Arana, fundó otro Carmelo en Kottayam (India) enviando a 8 monjas. A ella no le permitieron ir sus superiores.

Durante la 2ª República Española y sus problemas y tensiones con la Iglesia Católica la Madre Maravillas solicitó y obtuvo permiso del Papa Pío XI para salir con su comunidad, exponiendo sus vidas, si llegara el momento de defender la Sagrada Imagen, en caso de ser profanada.

En julio de 1936, milicianos republicanos tomaron el Cerro de los Ángeles, fusilaron a la efigie del Sagrado Corazón y volaron con dinamita el monumento. Las Carmelitas fueron expulsadas de su convento y llevadas detenidas a las Ursulinas de Getafe. Tras ser retenidas en Getafe, donde las hermanas pensaron que serían ajusticiadas, Dolores Ibárruri, "la Pasionaria", supuestamente, hizo que fuesen llevadas a Madrid, a un piso de la Calle Claudio Coello, donde pasaron 14 meses. La actuación de Ibárruri la sostiene el historiador Juan Manuel Riesgo Pérez-Dueño, profesor asociado de la Universidad Complutense, en una carta publicada en el diario El País  el 21 de noviembre de 2008. Este historiador señalaba que la Pasionaria era una admiradora del trabajo y la entrega a los humildes de las mojas, con las que estudió, y que por eso las salvó.

En 1937 la madre pudo salir con su comunidad de Madrid y, pasando por Lourdes, entró en España para instalarse en Las Batuecas (Salamanca). Allí, a petición del Obispo de Coria Cáceres. En 1938 hizo voto de hacer siempre lo más perfecto. En marzo de 1939 pudo volver a recuperar, totalmente  destruido por la guerra, el Carmelo de El Cerro de los Ángeles, donde fue nuevamente elegida priora.

En ese tiempo, se dice de ella que dio testimonio de fe, heroísmo y fortaleza, prudencia y serenidad, además de una extraordinaria confianza en Dios.

Desde entonces, realizó las fundaciones de muchos otros Carmelos: Mancera de Abajo (Salamanca, 1944); Duruelo (Ávila, 1947); en 1950 traslada la Comunidad de las Batuecas, a Cabrera (Salamanca); Arenas de San Pedro (Ávila, 1954); San Calixto (Córdoba, 1956); Aravaca (Madrid, 1958); La Aldehuela (Madrid, 1961), en el que es elegida priora y en el residió hasta su muerte; en Montemar-Torremolinos (Málaga, 1964).

Además, con hermanas de algunos de los Carmelos fundados por ella, ayudó en 1954 a la fundación del Carmelo de Cuenca, Ecuador, en 1964 al de El Escorial, y en 1966 al de La Encarnación de Ávila, donde había entrado y vivido Santa Teresa de Jesús durante 30 años. En 1960, en Talavera de la Reina (Toledo), edifica un convento, también con Iglesia de nueva planta, para los padres carmelitas descalzos.

En La Aldehuela vivió sus últimos 14 años y continuó atendiendo las necesidades de los demás Carmelos anteriormente citados. Desde la clausura, realizó diversas labores sociales como la construcción de una barriada 200 viviendas en La Aldehuela, un colegio para niños desfavorecidos y una Iglesia. Sostuvo económicamente a distintos seminaristas para que pudieran llegar a ser sacerdotes, realizó una fundación benéfica para sostener a religiosas enfermas, compró una casa en Madrid para alojar a las carmelitas que tuvieran necesidad de permanecer algún tiempo en tratamientos médicos y costeó al Instituto Claune la edificación de una clínica para religiosas de clausura. Se dice de ella que su gran caridad hizo que siempre se  interesara por los problemas de los demás y se esforzaba por solucionarlos, que empezaba los proyectos sin fondos pero con gran confianza en Dios y que finalmente lograba llevarlos a cabo.

Siguiendo las directrices del Concilio Vaticano II, que aconseja la unión o asociación de monasterios de vida contemplativa, en 1972 obtuvo la a probación de la Santa Sede de la Asociación de Santa Teresa", integrada por los carmelos fundados por ella-y por otros que entonces se adhirieron- y, en 1973, fue elegida presidenta.

En su vida, además del Padre Alfonso Torres, S.J. fueron sus directores espirituales el Padre Florencio del Niño Jesús, O.C.D., y el Padre Valentín de San José, O.C.D. Parece que La Madre Maravillas vivió una maravillosa experiencia de su unión con Dios, con una rica vida interior, como se refleja en las cartas íntimas a sus directores espirituales, datos que se han conocido después de su muerte.

En 1962 tuvo un trastorno circulatorio del que se repuso. En 1972 sufrió un paro cardíaco del que se recuperó, pero su salud parece que quedó ya muy afectada. Falleció el 11 de diciembre de 1974, a los 83 años en el Carmelo de La Aldehuela. Dicen que La Madre Maravillas murió exclamando: "¡Qué felicidad morir carmelita!" y "¿Que me voy al Cielo?, ¡Qué alegría!, ¿Cómo no me lo han dicho antes?". Expiró a las 16:20 de la tarde. Ya fallecida parece que ocurrió un fenómeno extraño de "osmogénesis" u "olor paranormal o de causa desconocida" (como define la Parapsicología, o más bien denominada Parapsicobiofísica por Germán de Argumosa, disciplina que estudia los fenómenos paranormales). Según el Padre Carmelita Simeón de la Sagrada Familia: "El cadáver estaba flexible (otro hecho extraño) y, al medidodía, las dos hermanas enfermeras, que se encontraban rezando junto a sus restos mortales, percibieron un intensísimo olor a nardos (olor usual en fenómenos sobrenaturales asociados a Santos o la Virgen María). Se retrasó un día el entierro, y se llamó a un forense que confirmó el inexplicable olor. Sus restos descansan en el Carmelo de La Aldehuela, a las afueras de Getafe, en Madrid.

Sobre su persona se cuenta que ella decía que se sentía feliz de ser carmelita descalza, "hija de nuestra santa madre Teresa" y consideraba un tesoro de la vida los textos de Santa Teresa de Jesús y San Juan de la Cruz. Cuentan que destacó por su fidelidad al ideal Teresiano.

Ejerció como Priora de la Comunidad, durante 48 años, y se dice de ella también que mostró a su hermanas caridad y firmeza, ánimo y consuelo, pidiendo siempre el parecer de los demás. Asimismo, que irradiaba paz y dulzura en sus palabras y gestos, que quienes la trataron salieron siempre agraciados con su testimonio de amor a Dios y de disponibilidad a la Iglesia como fiel hija suya.

Algunas frases de La Madre Maravillas de Jesús son las siguientes:

"Yo no quiero la vida más que para imitar lo más posible la de Cristo".

"Viva Cristo en mí y yo en Él. ¡Qué felices somos! Nadie nos puede quitar esta felicidad, que nunca disminuye si el alma es fiel; cada día que pasa es más grande, y en el cielo será infinita".

"El señor es el único que puede tocar los corazones, y la oración nunca deja de ser escuchada".

"Lo que Él quiera! Si él no lo quiere, ¿para qué vamos a quererlo nosotras?"

Entierro de La Madre Maravillas en la Aldehuela. 13 de diciembre de 1974.
Y después de haber expuesto este amplio desarrollo de datos, en esta segunda entrada dedicada a los "mistéricos" fenómenos que acabamos de relatar, pasaré al apartado de reflexiones en torno a los fenómenos planteados:

¿Verdaderamente hubo milagro en los dos casos planteados?

Ambos eran casos en que la muerte parecía inevitable (causa natural) y en ambos casos hubo una recuperación inexplicable, en la que, se pidió la ayuda al mismo personaje asociado a la creencia de que pudiera salvarles milagrosamente.

En el caso del niño Manuel no hubo daños cerebrales irreversibles como sucede en estos casos. El daño posterior a vivir semejante accidente, según las circunstancias tenidas en cuenta, no aconteció en el sujeto después en su vida en modo alguno, cuando ello inevitablemente-y materialmente- tendría que haber ocurrido. También es igualmente relevante que una persona diagnosticada médicamente como clínicamente muerta por falta de pulso, con electrocardiograma plano y sin respiración, tras haber sobrepasado con creces los límites de lo aceptable para una reanimación satisfactoria de su constantes vitales, vuelva a la vida.

En el caso de Alfonsa García, la muerte también parecía inevitable, ya había sido desahuciada por los médicos y todo indicio racional dentro de los conocimientos médicos hacía prever la muerte como desenlace. Y una mañana la paciente amanece sin dolencia alguna.

Entonces, ¿hubo en estos casos milagro? En un principio, desde mi opinión personal, con una perspectiva libre de fe, de la religión, observo hubo dos sujetos en que sus condiciones inevitables naturales de muerte (o grave daño-posteriores secuelas) desaparecieron sin explicación conocida, entendiendo sin "explicación conocida" dentro de lo que conocemos por nuestro conocimiento científico del mundo material ahora mismo. Y que al mismo tiempo en estos casos, se rogó a un personaje religioso fallecido que los sanase, al que se le concedían en creencia poderes más allá de los naturales, por asociación con Dios. Según este planteamiento, la descripción de las situaciones se corresponde con la definición de milagro propuesta al comienzo de este artículo, más también hay correspondencia en su finalidad espiritual, como desarrollaremos más tarde.

Y desde una visión religiosa católica, o de creencia en lo trascendental, por correspondencia de los datos y la teoría del milagro, según lo expuesto antes, diría que sí, que hublo milagro.

Por otro lado expongo que en estos casos la explicación desconocida aún-para la ciencia-, supone prueba suficiente para la Iglesia para certificar rigurosamente el milagro. Cabe dejar claro aquí, que para la ciencia cualquier fenómeno está siempre en visos de ser explicado, o re-explicado, considero que la ciencia jamás es inmóvil y siempre se pregunta, o se debería de preguntar por todos, y digo todos, los fenómenos o hechos que acontecen en el universo. Considero además que la ciencia, nunca apoyaría la existencia de milagros según la teoría del milagro, según su método, y según su cúmulo de conocimiento. Otra cosa es que la Iglesia se sirva de ese cúmulo de conocimiento para certificar hasta cierto límite de rigurosidad, lo que ellos consideran como hecho milagroso según su pensamiento.

Ahora, dejaré mis reflexiones y opiniones más personales en torno al caso que tratamos hoy aquí...

Comienzo con la siguiente pregunta: Si todos en casos de muerte, gravísimo percance... rezamos a un Santo, divinidad, etc...¿vamos a salvarnos, obtener la salvación milagrosa?. No lo creo. No creo que Dios premie más a quien le reza en casos extremos donde inevitablemente la muerte en el mundo material es del todo segura.

Considero que, si Dios es todopoderoso y por medio de intermediación de un Santo/a, figura religiosa destacada u otra figura o ser, salva a alguien en estos casos, me da la impresión de que todo aquello ya estaba preparado, como una señal especial para que todos y todas nos fijemos.

Por el momento, tengo la impresión en mi pensamiento, sobre este tema de los milagros que estos, desde el campo de la fe (observados desde las gafas de la fe), son hechos significativos para que las personas que los conozcan o vivan tengan indicios de que existe un poder superior a todo lo que hay conocido, y habrá por conocer, es decir, existe un Dios todopoderoso que puede cambiar la realidad, y de que la vida, valores y hechos de ciertos personajes que se le asocian, es algo a tener en cuenta, el camino a seguir, porque cuando se les pide su intercesión (se cree en ellos, rezando con fervor, etc...), puede llegar a ocurrir lo milagroso.

Todo esto me recuerda a cuando Jesús curaba milagrosamente y él decía que esto ocurría porque las personas habían creído en él, habían tenido fe en él y en su mensaje. Parece que en estos dos casos de curación milagrosa y el Evangelio estamos ante una lógica semejante. Además, esta finalidad que le estoy dando al hecho milagroso, por el momento lo más que se me asocia, es con la finalidad espiritual de la que trata la teoría sobre los milagros.

Por otro lado, si consideramos todo esto desde el campo de la ciencia rigurosa (observamos desde las gafas de la ciencia), estos sucesos que acabamos de relatar serán casos no explicados aún sobre cómo estas personas pudieron superar trances que se estimaban del todo probables en resultado mortal o fatal, según lo conocido por la ciencia hasta ahora.

Espero que os haya interesado este artículo y os invito a pensar sobre ello si tenéis tiempo y os ha llamado la atención. Mi ideas son sólo las mías, y no pretendo en ningún caso proponerlas como las mejores, en este artículo, o en cualquiera sobre los aquí planteados. En mi caso prefiero un mundo de total librepensamiento y búsqueda personal a uno de dogmas, coerciones e inmovilismo, de aquí que también en parte me haya animado a abrir este blog.

Si lo deseáis podéis escribir en el apartado de comentarios a este artículo o mandarme un email a despuesdemedianocheblog@gmail.com para lo que estiméis. Eso sí, recordad, con educación y respeto, los comentarios que no cumplan con estas características serán eliminados y no tenidos en cuenta.


Hasta la próxima amigos y amigas.

Javier.









                                       Carmelo de La Aldehuela, Getafe (Madrid)

Artículos y documentación consultada y utilizada para la realización de este artículo: 

http://www.lne.es/asturias/2008/12/26/primer-milagro-sor-maravillas/710448.html

http://luisival.blogspot.com.es/2009/12/santa-maravillas-de-jesus-biografia-la.html

https://www.youtube.com/watch?v=hWeZAVw21vY&noredirect=1

http://emausmadremaravillas.galeon.com/maravi.htm

http://www.corazones.org/liturgia/santos/maravillas_de_jesus.htm

http://webcatolicodejavier.org/maravillas.html

http://webcatolicodejavier.org/marabio.html

http://www.santisimavirgen.com.ar/pensamientos_maravillas.htm

http://www.elmundo.es/suplementos/cronica/2008/684/1227394801.html

https://es.zenit.org/articles/milagro-por-intercesion-de-la-madre-maravillas/




2 comentarios:

  1. madrecita curame la parte sacro lumbar y los tuneles carpianos ,gracias,te amo

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  2. Por favor intercede ante Dios por la salud de mi hermano Luis Alberto Cattolica, que desaparezca su enfermedad. Gracias

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